SAN DIEGO — James y Sarah Slavinsky estaban en un viaje de aniversario cuando tuvieron que ayudar en una misión de rescate.
Los dos residentes de Chandler estaban en San Diego para celebrar su 25 aniversario.
Decidieron pasar por Point Loma cerca del Monumento Nacional Cabrillo. Allí vieron un bote luchando contra las olas del mar.
"Las olas estaban destrozando ese pequeño bote", dijo James.
El bote pronto chocaría contra un arrecife y comenzaría a partirse. Las primeras tres personas saltaron al agua, seguidas de docenas más.
"La puerta se abrió y todas estas personas empezaron a saltar y saltar", dijo Sarah.
Los dos dijeron que más de 20 personas estaban a más de 100 yardas de la costa. Algunos gritaban pidiendo ayuda mientras Sarah y James bajaban para tratar de ayudar.
"Se estaban aferrando a todo lo que podían para mantenerse a flote", dijo James.
"Estaban descalzos. Estaban nadando en jeans azules. Estaban cortados. Tenían frío. Estaban cansados", dijo Sarah.
Las autoridades describieron las condiciones durante los rescates como difíciles con cinco a seis pies de oleaje, ráfagas de viento y temperaturas del agua de alrededor de 60 grados.
James, un veterano de la Marina, se metió en el agua para ayudar a quien pudiera.
"Si los veía, los alcanzaba", dijo James.
La pareja no estaba sola, ya que otras personas en la orilla colaboraron para ayudar a rescatar a los que huían del barco.
Mientras algunos intentaban arrastrar a la gente a la orilla, otros cuidaban de las personas en las playas cuando llegaban los socorristas.
En total, más de 20 personas fueron enviadas al hospital y cuatro personas murieron.
Las autoridades dijeron que el barco estaba traficando personas a través de la frontera.
Según la estación hermana de 12 News:
Jeffery Stephenson, de la Oficina de Asuntos Públicos de Aduanas y Protección Fronteriza, dijo que la agencia tenía todos los indicios de que el barco era un barco de contrabando que se utilizaba para traer personas a Estados Unidos ilegalmente.
Describió el barco como "severamente abarrotado"."[A los contrabandistas] no les importa la gente", dijo Stephenson.
Según los oficiales salvavidas de San Diego, sacaron del agua a siete de las 30 personas y realizaron un rescate en el acantilado mientras que los otros ocupantes sobrevivientes del bote nadaron hasta la orilla por su cuenta.
James y Sarah dijeron que habían escuchado sobre el tráfico de personas y los peligros en los informes, pero experimentar la realidad cara a cara les abrió los ojos.
"Es una cuestión de humanidad para mí ahora", dijo James. "Como ser humano, lo volvería a hacer. No me molestaría", añadió.
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